main content
< Volver a blog sobre aplicaciones móviles

Cómo hacer una página web para vender online

Tener una web hoy no es opcional, es obligatorio si quieres vender online. Pero no se trata solo de tener presencia en internet, sino de montar una página que realmente te ayude a vender tus productos o servicios.

Hay webs preciosas, hechas con mucho diseño y animaciones, que no venden ni una triste taza.

Y también hay webs simples, sin florituras, que convierten como una máquina. La diferencia está en cómo están pensadas. Una web buena es una herramienta de ventas, no un adorno digital.

 

¿Qué necesitas para empezar desde cero?

No necesitas ser programador, ni saber código. Tampoco necesitas pagar una fortuna a una agencia. Lo que sí necesitas son 3 cosas básicas:

  1. Un dominio (el nombre de tu web, tipo tuempresa.com)
     

  2. Un hosting (donde se aloja tu web)
     

  3. Un constructor web con el que puedas crear y modificar tu sitio sin depender de nadie
     

Y ojo, no voy a hablarte de Wix, ni Shopify, ni plantillas prefabricadas.

Esto va de hacer tu web de verdad, sin atajos de cartón piedra. Con algo que controles tú y que puedas actualizar tú, sin tener que llamar a nadie para cambiar un texto o una foto.

 

Elegir el nombre y dominio perfecto: consejos prácticos

Tu dominio es la puerta de entrada a tu negocio online. Tiene que ser claro, corto y fácil de recordar. Nada de guiones raros ni nombres que nadie sabe escribir.

Un truco que a mí me sirvió: piensa cómo lo dirías por teléfono. Si lo dices en voz alta y alguien no sabe escribirlo, busca otro.

Usa extensiones .com si están libres. Si no, puedes tirar de .net o incluso .es. Plataformas como Namecheap o el propio hosting que elijas te permiten buscar y registrar tu dominio al momento.

 

Hosting: qué buscar y qué evitar

El hosting es donde va a vivir tu web. Aquí no escatimes en exceso, pero tampoco te dejes llevar por la primera oferta. Un buen hosting debe tener:

  • Soporte técnico rápido y en español

     

  • Certificado SSL incluido (tu web con el candadito de “seguro”)
     

  • Cuentas de correo profesional incluidas

En mi caso, opté por un plan que me regalaba el dominio el primer año y me dejaba crear correos del tipo contacto@miempresa.com, lo cual da mucha más imagen profesional.

Evita hostings que se caen o que tienen paneles raros donde te pierdes. Lo barato sale caro si luego te desesperas con el soporte.

 

Cómo estructurar tu web para que convierta

Aquí viene lo bueno. La mayoría de webs no venden porque están mal estructuradas. Tu web debe ser clara, directa y orientada a conseguir lo siguiente:

  • Que te contacten
     

  • Que compren
     

  • Que confíen en ti

No necesitas mil secciones. Estas son las imprescindibles:

  • Inicio: clara, con tu propuesta de valor
     

  • Servicios o Productos: lo que vendes, explicado con claridad
     

  • Sobre ti: quién eres y por qué deberían confiar en ti
     

  • Contacto: formulario funcional y fácil de usar
     

  • Blog (opcional): para atraer visitas desde Google
     

Yo lo hice todo en WordPress con una plantilla básica y me centré en que el mensaje estuviera claro, no en que la web tuviera mil efectos de entrada.

 

El contenido que sí vende: textos e imágenes que funcionan

Aquí no te líes. No necesitas contratar a un copywriter de élite. Solo sigue esta fórmula:

  • Habla de tu cliente, no de ti.

  • Muestra beneficios claros.

  • Usa llamadas a la acción (“Pide presupuesto”, “Contáctanos ahora”).

Y con las imágenes, menos es más. Fotos limpias, reales, de buena calidad. Si puedes, de tu producto o negocio real. Nada de fotos de stock donde la gente sonríe falsamente con auriculares puestos.

 

Qué poner (y qué no) en tu página de inicio

Tu página de inicio debe decir de forma clara:
 

“Hola, esto es lo que hago. Esto es lo que ofrezco. Esto es lo que tienes que hacer ahora.”

Es decir, debe explicar:
 

  • Qué haces
     

  • Para quién lo haces
     

  • Qué problema resuelves
     

  • Y cómo se puede contactar contigo
     

Evita frases como “Bienvenido a nuestra página web” o “Somos una empresa comprometida con la excelencia”. Eso no vende. En cambio, frases como:

  • “Ayudamos a marcas pequeñas a tener presencia online y vender más”
     

  • “¿Quieres una web que convierta visitas en clientes? Estás en el sitio correcto.”
     

Son mucho más efectivas.

 

Cómo generar confianza con un diseño sencillo

No necesitas que tu web parezca la de Apple. Pero sí que inspire confianza. Para eso:

  • Usa una tipografía legible

  • Colores que representen tu marca (máximo 2 o 3)

  • Espacios en blanco: que respire, no atiborres

  • Certificado SSL (candado verde en el navegador)

  • Información de contacto real y visible

Y un consejo clave: un diseño profesional no es igual a un diseño complejo. La sencillez bien ejecutada transmite seriedad. 

Es por ello que en Tangram siempre confiamos en la Factoria de Arte y Diseño para realizar nuestro diseño web, con los profesionales mas cualificados y sus servicios de la mejor calidad y por subscripción!.

 

Formularios y llamadas a la acción que captan clientes

Aquí va otro error común: tener una web sin formularios, o con formularios que no funcionan.

Yo configuré el mío con campos básicos: nombre, correo, teléfono y un mensaje. Y un mensaje automático que dice: “Gracias, te responderemos en menos de 24h”.

Además, integré un plugin SMTP para asegurarme de que los mensajes llegaran de verdad a mi correo profesional.

Si no tienes un formulario activo y funcional, tu web no está vendiendo, está decorando.

 

Blog: ¿sí o no? Cómo usarlo para atraer visitas y vender más

Un blog bien hecho te puede traer visitas desde Google y mejorar tu posicionamiento. Eso sí, hay que currárselo.

Yo decidí incluir uno con contenido que responde a dudas comunes de mis clientes: cómo elegir un servicio, qué errores evitar, etc.

El truco es que el blog no sea un diario, sino una herramienta de ventas indirecta.

Consejo: si escribes un artículo, que esté bien optimizado. Usa títulos claros, subtítulos, imágenes, y termina siempre con una llamada a la acción.

 

SEO para novatos: cómo posicionarte sin ser experto

No necesitas ser un gurú del SEO para que tu web se posicione. Solo sigue estos principios básicos:

  • Palabra clave principal en el título, en la URL y en el primer párrafo
     

  • Usa encabezados (H2, H3) para organizar el contenido
     

  • Añade texto alternativo a las imágenes
     

  • Utiliza URLs limpias: tudominio.com/servicios mejor que tudominio.com/page?id=283
     

Y por supuesto, no copies texto de otras webs. Es mejor algo propio, aunque no sea perfecto.

 

El error de muchos: tener una web bonita que no vende

Este es el punto más importante: una web que no genera ventas es un gasto, no una inversión.

Muchos caen en la trampa del diseño y se olvidan del objetivo. ¿Tu web sirve para que te contacten, para que te compren, para que confíen en ti?

Si no cumple con eso, hay que rehacerla.

Yo mismo lo aprendí cuando monté mi primera web.

Al principio parecía bonita, pero no tenía llamadas a la acción, ni buen formulario, ni una propuesta clara. Tuve que replantearla de arriba abajo. Y cuando puse el foco en vender, empezaron los resultados.

 

Mantenimiento y mejoras: qué hacer después de publicarla

Una web no se termina cuando la publicas. Debes:

  • Revisarla una vez al mes
     

  • Actualizar contenidos
     

  • Corregir errores o enlaces rotos
     

  • Añadir testimonios o nuevos servicios
     

Además, puedes integrar herramientas como Google Analytics para ver cuántas visitas tienes, desde dónde vienen y qué hacen en tu web.

Esto te ayuda a mejorar continuamente.

Y si un día necesitas ayuda profesional para evolucionar tu web o escalarla, puedes contar con expertos como Tangram Consulting, que ofrecen soluciones a medida sin plantillas ni atajos, justo como a mí me gusta: bien hecho, y sin humo.

 

Conclusión: tu web como herramienta de ventas, no como adorno

Hacer una página web para vender online no es difícil, pero sí requiere claridad, enfoque y ganas de hacerlo bien.

No caigas en la trampa de lo “bonito pero inútil”. Crea algo funcional, profesional, sencillo y orientado a convertir.

Con un dominio propio, buen hosting, estructura clara y un mensaje potente, puedes tener una web que no solo esté online, sino que funcione como un comercial 24/7.

Y si necesitas ayuda con parte del proceso, recuerda: no estás solo. Hay soluciones, personas y herramientas que pueden darte el empujón que falta.

Contacta con nosotros
Fila 1